-Chupete confirmó que es uno de los mejores extranjeros de los últimos años. Soberbia jugada individual que mató a unos Tigres que intentaron todo, pero que nunca pudieron generar oportunidades de peligro.
-Me da gusto el triunfo de los Jaguares. Al menos debe reconocerse que existe un trabajo fuerte por parte de la nueva administración para rescatar una franquicia que se encontraba en franco declive y que está a años luz de alcanzar un grado de auténtica penetración como equipo de Primera División.
-Aplaudo la actuación de los Gallos, pero lamento que siga presentándose una irregularidad tan grande en el futbol mexicano. Santos, uno de los máximos protagonistas, tuvo una actuación de pesadilla.
-”¿Y todo para qué?”, se preguntan los aficionados cruzazulinos con el liderato general de su equipo. La verdadera alegría vendrá cuando los de la Noria acaben con la sequía de títulos.
-La victoria de Estudiantes premia a una directiva que ha sido incapaz de apostar por algo nuevo. Acevedo es uno de tantos técnicos que parecieran hacer fila sabiendo que tarde o temprano volverán a dirigir a los de Zapopan.
-Que Vuoso y Layún anotaran significó un extraordinario revulsivo en materia anímica para las Águilas. Se trata de dos elementos no muy queridos por la afición.
-El tropiezo de Pumas coloca a la escuadra auriazul en su triste realidad. Es una escuadra con muy poco material humano, que tendrá que entregarse al máximo para al menos colarse a la liguilla.
-Pachuca atraviesa por uno de esos ciclos naturales en una escuadra protagonista. Lo que no tengo claro es que Marini sea el indicado para sacarlos de este indeseable bache.
-Veo el corazón de Gallos, lo comparo con Necaxa y considero que los Rayos, salvo que el poder del dinero obre a su favor, son los principale candidatos a perder la categoría. Comizzo es más que Brailovsky como estratega.
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