-Las finales se ganan en los momentos decisivos. Cruz Azul no supo mantener la ventaja en la ida y Monterrey sí lo hizo en la vuelta.
-Jugó desde el cielo. La inyección anímica que significó el deseo de rendir homenaje a Antonio de Nigris fue vital para que se diera el título regio.
-Cuesta explicar la maldición celeste. Tantas oportunidades y nulos resultados. Más pronto que tarde, el momento llegará.
-El “Chupete” Suazo está convertido en el mejor artillero del futbol mexicano. Así como se elogia a Cabañas, debe dimensionarse lo que ha hecho Humberto en nuestro balompié.
-Corona nunca marcó diferencia. Un gran arquero no sólo registra actuaciones promedio, sino que es capaz de ganar partidos por sí mismo.
-Aldo de Nigris merece un llamado a la Selección Mexicana. No es un fuera de serie, pero dadas las circunstancias, su carácter y presencia me convencen más que Sabah o Franco.
-De pena ajena que en TV Azteca cortaran la transmisión de inmediato, sin dar al menos diez minutos para que se expresaran los Campeones.
-Un fuerte aplauso a Víctor Manuel Vucetich. Este torneo demostró la importancia de ser experimentado. Meza, Tomás Boy el propio “Vuce” acabaron imponiéndose a la juventud.
-Si la ley de probabilidades existe, aunque en esta final haya recibido un duro golpe, Cruz Azul pronto será Campeón del futbol mexicano.
-A los celestes, les prometo no volver a dar al Cruz Azul como favorito.
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